Procedimientos Matrimoniales

Divorcios y Trámites de divorcio

El divorcio matrimonial, es la figura jurídica que anula la existencia del matrimonio civil, celebrado ente dos personas. A diferencia con la separación matrimonial, los divorcios producen la anulación definitiva del vínculo matrimonial. En este caso, el matrimonio desaparece con todo los efectos que con ello conlleva, pudiéndose contraer nuevamente matrimonio, por separado, cualquiera de los cónyuges. Las parejas podrán divorciarse directamente, una vez haya transcurrido el periodo de tres meses desde que contrajeron matrimonio.

Al igual que la separación matrimonial, los divorcios pueden ser:

a) de “mutuo acuerdo”, que se da cuando ambos cónyuges aceptan la decisión de divorciarse, para lo que plasman en un convenio regulador las condiciones del mismo, que será presentado y homologado por el Juez competente.

b) Y “contencioso“, donde la falta de acuerdo obliga a que sea el propio Juez el que decida sobre esos mismos puntos.

Le aseguramos que será atendido por un especialista en la materia, quien le resolverá todas sus dudas y velar por su intereses, ofreciéndole un trato estrictamente confidencial y personalizado.

 

 

Liquidación de Gananciales

El letrado director del despacho ha llevado cabo diversas liquidaciones conflictivas actuando como contador-partidor.

Ante cualquier división patrimonial, y en especial cuando se trata de Liquidación de Gananciales, coexiste un componente emocional junto con el interés económico; lo que nos lleva a considerar como imprescindible una fase previa de la negociación previa con la parte contraria, puesto que judicialmente son procesos que pueden alargarse durante años.

Para liquidar los bienes gananciales se precisa la realización de tres fases: formar el inventario que conforman los bienes gananciales, valorarlos y finalmente adjudicarlos al 50%.  En cualquiera de éstas fases puede alcanzarse un acuerdo, de ahí la importancia de nuestro abogado-mediador, siempre y cuando exista la posibilidad de resolver la división o liquidación de los bienes gananciales de manera extrajudicial; más aún si consideramos la frecuente circunstancia de que la vivienda familiar suele ser ganancial, estar asignado el uso a los hijos, importes pagados por padres. El proceso de liquidar los bienes gananciales requiere de un especial cuidado que ha de encomendarse a un profesional experto.